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jueves, 22 de marzo de 2012

Iniciativa de Proyecto de Coherencia Global- ¡NO GENEREMOS MIEDO!



La Iniciativa de Coherencia Global es un proyecto de investigación en colaboración con el Instituto de Matemáticas del Corazón, la Dra. Elizabeth Rauscher y otros ingenieros y científicos para diseñar, construir y mantener un Sistema de Monitoreo coherencia global (MCG). El GCMS medirá directamente las fluctuaciones de los campos magnéticos generados por la tierra y la ionosfera. Dr. Rauscher, un astrofísico de renombre internacional y un científico nuclear, ha trabajado en instituciones como el Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley y el Laboratorio Lawrence Livermore y la consulta regularmente con la NASA y de la Marina de los EE.UU.. A partir de principios de 1980, ella y su esposo, el Dr. William Van Bise, construyó un detector sensible a campos magnéticos para controlar el campo geomagnético y las pulsaciones y resonancias asociadas con excitaciones de la ionosfera. Su investigación ha dado lugar a algunas conclusiones importantes. 

Por ejemplo, dos o tres semanas antes de los terremotos o las erupciones volcánicas, cambios magnéticos de la tierra sobre el terreno, lo que sugiere que un sistema de monitoreo multiestación podría predecir terremotos y erupciones volcánicas. No sólo los Dres.Rauscher y Van Bise predecir la erupción cataclísmica del Monte St. Helens en Washington, en el año y medio después de la erupción, que predijeron un 84 por ciento de la actividad sísmica que ocurre dentro de un área de 100 millas cuadradas en torno a un solo detector. Este hallazgo por sí solo justifica el desarrollo de un sistema de vigilancia mundial, pero hay aún más razones importantes para hacerlo. La comunidad científica está empezando a apreciar cómo los campos generados por los sistemas vivos y la ionosfera interactúan entre sí. Por ejemplo, la tierra y la ionosfera generar una sinfonía de frecuencias que van desde 0,01 hertzios a 300 hertzios, y algunas de las resonancias grandes que se producen en campos de la tierra están en el mismo rango de frecuencia como las del corazón y el cerebro humanos. Aunque los investigadores han analizado algunas de las posibles interacciones entre los campos de la tierra y la actividad humana, animal y vegetal, los científicos apenas han arañado la superficie de lo que se puede lograr con algo tan sofisticado como el Sistema de Coherencia Global Monitoring. Una serie de importantes conclusiones ya han surgido. Por ejemplo, cambios en el campo magnético de la tierra se asocian con cambios en la actividad del sistema nervioso y al cerebro, el rendimiento de la memoria deportiva, y otras tareas, sensibilidad en una amplia gama de experimentos de percepción extrasensorial, la síntesis de nutrientes en plantas y algas; el número de violaciónes de tráfico y los accidentes reportados, la mortalidad por ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, y la incidencia de la depresión y el suicidio. Es interesante notar quelos cambios en las condiciones geomagnéticas afectan los ritmos del corazón con más fuerza que todas las funciones fisiológicas estudiadas hasta ahora . También hay pruebas de que en algunos casos que las ondas cerebrales de la gente puede sincronizar con el ritmo de las ondas electromagnéticas generadas en la ionosfera de la Tierra . Cuando las personas dicen que "sienten" un inminente terremoto u otros eventos planetarios, tales como los cambios de clima, es posible que se puedan reaccionar a las señales físicas reales que se producen en el campo de la tierra antes del evento. Si bien no es difícil concebir que las formas de vida incrustadas en los campos magnéticos de la Tierra podría verse afectada por las modulaciones en estos campos, es una propuesta de mayor alcance para sugerir que los campos de la tierra puede ser influenciado o moduladas por las emociones humanas . Sin embargo, los investigadores teorizan que el GCI, cuando un gran número de seres humanos responden a un evento mundial con un sentimiento emocional común, la respuesta colectiva puede afectar a la actividad en el campo de la tierra. En los casos en que el evento evoca respuestas negativas, esto podría ser considerado como una onda de esfuerzo planetario, y en los casos en que se crea una onda positiva, se podría crear una onda de coherencia global. Esta perspectiva es apoyada por la investigación en el Instituto de Matemáticas del Corazón, que se ha demostrado que las emociones no sólo crear la coherencia o incoherencia en nuestros cuerpos, pero, al igual que las ondas de radio, también irradian hacia el exterior y son detectados por los sistemas nerviosos de los demás en nuestro entorno. Se Ahora está claro que nuestro sistema nervioso detectar estas ondas electromagnéticas generadas por los demás en nuestro entorno, pero también hay evidencia de un efecto global, cuando un gran número de personas a crear olas similares de salida. Por ejemplo, la investigación llevada a cabo por Roger Nelson y su equipo en la Universidad de Princeton para el Proyecto de Conciencia Global utiliza una red mundial de generadores de números aleatorios. Sus resultados han proporcionado pruebas convincentes de que la conciencia humana y la emotividad crear o interactuar con un campo global, que afectan a la aleatoriedad de estos dispositivos electrónicos. El mayor cambio en los generadores de números aleatorios se produjeron durante los ataques terroristas en el World Trade Center el 11 de septiembre de 2001. Aún más interesante fue el hecho de que los generadores de números aleatorios se vieron afectados significativamente unos cuatro a cinco horas antes del ataque, lo que sugiere una intuición colectiva de todo el mundo sobre el evento inminente (ver Figura 1). 


La Iniciativa de Coherencia Global es un proyecto de investigación en colaboración con el Instituto de Matemáticas del Corazón, la Dra. Elizabeth Rauscher y otros ingenieros y científicos para diseñar, construir y mantener un Sistema de Monitoreo coherencia global (MCG). El GCMS medirá directamente las fluctuaciones de los campos magnéticos generados por la tierra y la ionosfera. Dr. Rauscher, un astrofísico de renombre internacional y un científico nuclear, ha trabajado en instituciones como el Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley y el Laboratorio Lawrence Livermore y la consulta regularmente con la NASA y de la Marina de los EE.UU.. A partir de principios de 1980, ella y su esposo, el Dr. William Van Bise, construyó un detector sensible a campos magnéticos para controlar el campo geomagnético y las pulsaciones y resonancias asociadas con excitaciones de la ionosfera. Su investigación ha dado lugar a algunas conclusiones importantes. Por ejemplo, dos o tres semanas antes de los terremotos o las erupciones volcánicas, cambios magnéticos de la tierra sobre el terreno, lo que sugiere que un sistema de monitoreo multiestación podría predecir terremotos y erupciones volcánicas. No sólo los Dres.Rauscher y Van Bise predecir la erupción cataclísmica del Monte St. Helens en Washington, en el año y medio después de la erupción, que predijeron un 84 por ciento de la actividad sísmica que ocurre dentro de un área de 100 millas cuadradas en torno a un solo detector. Este hallazgo por sí solo justifica el desarrollo de un sistema de vigilancia mundial, pero hay aún más razones importantes para hacerlo. La comunidad científica está empezando a apreciar cómo los campos generados por los sistemas vivos y la ionosfera interactúan entre sí. Por ejemplo, la tierra y la ionosfera generar una sinfonía de frecuencias que van desde 0,01 hertzios a 300 hertzios, y algunas de las resonancias grandes que se producen en campos de la tierra están en el mismo rango de frecuencia como las del corazón y el cerebro humanos. Aunque los investigadores han analizado algunas de las posibles interacciones entre los campos de la tierra y la actividad humana, animal y vegetal, los científicos apenas han arañado la superficie de lo que se puede lograr con algo tan sofisticado como el Sistema de Coherencia Global Monitoring. Una serie de importantes conclusiones ya han surgido. Por ejemplo, cambios en el campo magnético de la tierra se asocian con cambios en la actividad del sistema nervioso y al cerebro, el rendimiento de la memoria deportiva, y otras tareas, sensibilidad en una amplia gama de experimentos de percepción extrasensorial, la síntesis de nutrientes en plantas y algas; el número de violaciónes de tráfico y los accidentes reportados, la mortalidad por ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares, y la incidencia de la depresión y el suicidio. Es interesante notar quelos cambios en las condiciones geomagnéticas afectan los ritmos del corazón con más fuerza que todas las funciones fisiológicas estudiadas hasta ahora . También hay pruebas de que en algunos casos que las ondas cerebrales de la gente puede sincronizar con el ritmo de las ondas electromagnéticas generadas en la ionosfera de la Tierra . Cuando las personas dicen que "sienten" un inminente terremoto u otros eventos planetarios, tales como los cambios de clima, es posible que se puedan reaccionar a las señales físicas reales que se producen en el campo de la tierra antes del evento. Si bien no es difícil concebir que las formas de vida incrustadas en los campos magnéticos de la Tierra podría verse afectada por las modulaciones en estos campos, es una propuesta de mayor alcance para sugerir que los campos de la tierra puede ser influenciado o moduladas por las emociones humanas . Sin embargo, los investigadores teorizan que el GCI, cuando un gran número de seres humanos responden a un evento mundial con un sentimiento emocional común, la respuesta colectiva puede afectar a la actividad en el campo de la tierra. En los casos en que el evento evoca respuestas negativas, esto podría ser considerado como una onda de esfuerzo planetario, y en los casos en que se crea una onda positiva, se podría crear una onda de coherencia global. Esta perspectiva es apoyada por la investigación en el Instituto de Matemáticas del Corazón, que se ha demostrado que las emociones no sólo crear la coherencia o incoherencia en nuestros cuerpos, pero, al igual que las ondas de radio, también irradian hacia el exterior y son detectados por los sistemas nerviosos de los demás en nuestro entorno. Se Ahora está claro que nuestro sistema nervioso detectar estas ondas electromagnéticas generadas por los demás en nuestro entorno, pero también hay evidencia de un efecto global, cuando un gran número de personas a crear olas similares de salida. Por ejemplo, la investigación llevada a cabo por Roger Nelson y su equipo en la Universidad de Princeton para el Proyecto de Conciencia Global utiliza una red mundial de generadores de números aleatorios. Sus resultados han proporcionado pruebas convincentes de que la conciencia humana y la emotividad crear o interactuar con un campo global, que afectan a la aleatoriedad de estos dispositivos electrónicos. El mayor cambio en los generadores de números aleatorios se produjeron durante los ataques terroristas en el World Trade Center el 11 de septiembre de 2001. Aún más interesante fue el hecho de que los generadores de números aleatorios se vieron afectados significativamente unos cuatro a cinco horas antes del ataque, lo que sugiere una intuición colectiva de todo el mundo sobre el evento inminente (ver Figura 1). 


La evidencia de la intuición colectiva


Figura 1.
La evidencia de la intuición colectiva: RNG de datos de sitios de GCI en el Mundo por los ataques terroristas 9/11/01.


El Sistema e Coherencia Global Monitoring directamente a medir el campo magnético del planeta, que se postula debe ser mucho más sensibles a los efectos de la base de las emociones-las interacciones colectivas humanos que pueden ser detectados con otros tipos de detectores. Por ejemplo, dos Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), los satélites de meteorología espacial de monitoreo de campo geomagnético de la tierra también se muestra un incremento considerable en el momento del ataque 11 de septiembre y durante varios días a partir de entonces, lo que indica la onda de la tensión causada posiblemente por la emoción de masa humana, creada modulaciones en el campo geomagnético (ver Figura 2).

Geoestacionarios Satélites Operacionales medio ambiente - Medición del campo geomagnético de la Tierra

Figura 2.
Geoestacionarios Satélites Operacionales medio ambiente - Medición del campo geomagnético de la Tierra.
Sistema de Monitoreo Global de la coherencia se establecerá una red mundial de estaciones de sensores para medir las fluctuaciones en los campos geomagnético de la tierra para los siguientes fines:


  1. Verificar el grado de terremotos, erupciones volcánicas y otros fenómenos energéticos del planeta se reflejan en y predijo por los patrones específicos de actividad en la dinámica del campo magnético de la Tierra.
  2. Examinar el grado en que existe una resonancia energética entre el campo magnético de la tierra y los ritmos del corazón humano y la actividad cerebral.
  3. Examinar la influencia del campo de la tierra en los patrones de conducta colectiva humana.
  4. Examinar el grado en el que se refleja colectiva resonancia emocional humana en respuesta a eventos de masas de importancia emocional común en la actividad de campo magnético de la tierra.


Creemos que la coherencia del sistema de Vigilancia Mundial puede facilitar una mejor comprensión de las interacciones mutuas entre los seres humanos y nuestro medio ambiente global. Mucho más importante, sin embargo, está solicitando la colaboración de los individuos y grupos de personas en el establecimiento y amplificar coherentes que van fuera de los campos que interactúan con los campos planetarios, ayudando así a establecer una coherencia global. 

Por ejemplo, cuando un desastre ha devastado un área, la comunidad GCI será alertado para enviar el cuidado del corazón coherente a las personas en esa zona durante un período especificado de tiempo para ayudar a reducir el sufrimiento y la negatividad. 

Creemos que las intenciones coherentes tener un impacto positivo, pero esto no ha sido probada científicamente.Proporcionar prueba de ello es uno de los objetivos del proyecto. Los investigadores utilizarán los datos recogidos por el GCMS para investigar a través de estudios controlados con lo que los efectos de una mayor coherencia se encuentran en el campo de la tierra y si se traducirá en mejores resultados sociales y de salud. La Comunidad Coherencia Global recibirán informes regulares de los resultados. El desarrollo y la implementación del Sistema de Coherencia Global Monitoring requiere apoyo financiero. Haga clic aquí para aprender cómo usted puede hacer una donación individual u organizacional, o patrocinar un sitio del sensor. 





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FUENTE



DEL SITIO DE GREGG BRADEN:

DEL SITIO DE GREGG BRADEN:
Iniciativa Sistema de Coherencia Global


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